jueves, 24 de enero de 2008

Péndulos semi-giratorios





Profanás.


Devoras, y al mismo tiempo te tengo inmerso en medio de tristezas que realmente se alimentan de momentos.

Momentos inventados. Quiebres simultáneos. Tempestades pasajeras.

Como sea. No llego a percibir tus manías. Que piden algo de mi atención y que imploran cosas imposibles. Y el tiempo, que posiblemente siga allí. Y pensamientos blancos, dentro de pensamientos de colores, grises paisajes que nos rodean/ all time.


Terminaremos haciendo cosas, como hace tiempo, diciendo y contradiciendo como niños, sólo por poner cada cosa en su lugar. Sin tener en cuenta que tendemos a accionar y reaccionar como primitivos. Y la ciudad nos apaña, dentro de sus vertiginosos juegos. Interminables juegos.

No hay comentarios: