martes, 6 de mayo de 2008

En medio de un vómito

Imaginariamente lo presentí, desde aquel momento yo supe que me iba a morir, morir en palabras, desde que este texto comenzó, comenzó también mi muerte, la muerte interior, la exteriorización de mis muertes interiores. Ser o no ser. Otra vez la contradicción, esa maldita torturadora de mis noches, ese amor-odio que no he podido aún superar. Ese colapso nervioso al que me refiero cuando rompo vidrios, y esas cosas. Si supieras cuan fácil es desbaratarme en pedazos, si entendieras la mitad de la mitad de este todo-nada. Se trata de abrir los ojos ante mis palabras mudas, se trata de una simple interpretación de mi locura, de mi desesperación, se trata de girar ante uno mismo y darse cuenta que la soledad donde no hay libertad no existe. Mi locura se refiere a la falta de medicación, a la falta de síntomas, a la falta de todo, en realidad. Cada posibilidad es tan absurda como la otra, cada trazo de esta historia es tan aberrante como el último, cada sensación, cada vidrio en pedazos, esa soy yo, nada más que nadie sabe verme. Todo está en la raíz, en la raíz de mi interior, en ese abrupto salto hacia tu mundo, en tu mundo tropieza mi ilusión, entonces cae y se pudre en tu paraíso de ignorancia, en tu frialdad, la puta madre, no puedo seguir escribiendo esto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gorda es muy bueno eso, de verdad
te olvidaste mi cumple!

Anónimo dijo...

tendrias que haber seguido escribiendo...
Aparte de que el texto es muy bueno, es un buen ejercicio de catarsis. (Mis errores ortograficos son adredes :P)... Siempre admire que alguien pudiera decribir estadios que yo nunca pude.

Saludos che